La ocurrencia de deslizamientos del volcán Concepción es uno de los peligros constantes al que viven expuestos los habitantes de la Isla de Ometepe, en Rivas.
Habitantes de la Isla de Ometepe, Rivas, ya han sido sorprendidos, en más de una ocasión, por el lanzamiento de cenizas del volcán Concepción. Sin embargo, no solo a ese peligro se enfrentan, ya que también persiste la probabilidad de movimientos en masa (desplazamientos de suelo, piedras o rocas), que estudia el Instituto de Geología y Geosífica (IGG- CIGEO).
De acuerdo con el investigador Fernando Guarín, desde hace cinco meses trabajan en un proyecto piloto denominado “Reducción de riesgos: un análisis de susceptibilidad en el área de influencia del volcán Concepción”. El objetivo es crear mapas de susceptibilidad ante movimientos en masa.
El mapa de susceptibilidad permitirá identificar los lugares donde existen más probabilidades que ocurra un deslizamiento, explicó. Dichos datos se obtendrán tomando en consideración variables como la pendiente, geología, drenajes refirió el investigador.
Este proyecto piloto, según el investigador, cuenta con tres componentes: gobernanza (gestión de riesgo), susceptibilidad y vulnerabilidad. Hasta el momento se han identificado 20 puntos donde estarían llegando los deslaves provocados por movimientos en masas, que bajan por las laderas del volcán y pueden generar problemas serios sobre la población del rango de estudio (29, 724 personas) explicó.
Podría servir de modelo
El documento final de este proyecto estará disponible en el IGG-Cigeo con el objetivo que las autoridades del país y quien esté interesado en conocer del tema pueda acceder a este. Asimismo, la iniciativa podría servir como un modelo replicable para otros volcanes activos, destacó Guarín.
Por su parte, el geólogo Eduardo Mayorga, explicó que el volcán Concepción está propenso a lahares, no a deslizamientos (masa de tierra que se desprende o comienza a moverse, ya sea de forma paulatina o súbita), mientras que un lahar es una corriente de agua, con alto contenido de sólidos, que viaja como una corriente de lodo.
Estos lahares, desde la perspectiva de Mayorga, presentan uno de los mayores peligros en la zona, además de la misma actividad volcánica que pone en riesgo a la población.
Esfuerzos desde el Ineter
Con el apoyo del Instituto Geotécnico de Noruega (NGI) y el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter) se desarrolló el proyecto Mapa de riesgo de deslizamientos y sistemas de alerta temprana (2006-2010), cuyos datos refirieron que en el país se han registrado alrededor de 17 mil deslizamientos en varios puntos del territorio hasta esa fecha.
Estos deslizamientos fueron provocados por efectos de la precipitación. También se desarrolló un programa que analiza en tiempo real información sobre la estimación de la intensidad de la lluvia obtenida de satélites meteorológicos.
Víctimas del volcán Concepción
La huella de un deslave en el volcán Concepción dejó en el 2014 a una niña fallecida, originaria de Santa Teresa, comarca de los Ramos. En marzo del 2016 también se produjo otro deslave, pero en esta ocasión no hubo pérdidas humanas.
De acuerdo con el geólogo Eduardo Mayorga, lo que ocurre en el volcán Concepción son lahares que por su concepto técnico no es lo mismo que un deslizamiento o deslave. La recurrencia de estos puede ser variada; en algunas partes, podría ocurrir uno cada cinco años, mientras que en otros sectores son más constantes, explicó el experto. Por su parte, el gobierno ha realizado simulacros en la Isla de Ometepe de cara a una posible erupción y lahar.
El Mitch no se olvida
Después que un alud que bajara del Volcán Casitas sepultara a miles, el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter) declaró Estado de emergencia nacional y a partir de ese momento una serie de acciones en materia de gestión de riesgo se impulsaron. Una de las más representativas fue la Ley Creadora del Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (Sinapred), instancia que coordina una serie de simulacros a nivel nacional y locales ante amenazas naturales diversas al mismo momento.
Fuente: La Prensa