Tu presencia en esta red social profesional pondrá de manifiesto tu perfil, en el que se mostrará tu hoja de vida.
Aproximadamente, hace ocho años la plataforma LinkedIn inició su proceso de crecimiento en el que más usuarios empezaron a conectarse a esta red social de carácter profesional. LinkedIn nació con el principio de las redes de interconexión para hacer Networking (aumentar la red de contactos profesionales).
Según explica Sara Avilés, profesora de Marketing y Comunicación Digital de la Universidad Americana (UAM), y especialista en Comercio Electrónico, la teoría de las redes sociales dice que todos los usuarios tenemos tres grados de conexiones, así que de alguna manera vos llegás a conocer a alguien porque tienen una persona en común, y LinkedIn funciona con este principio, en el que el objetivo principal es que todos los profesionales puedan interconectarse en una misma red, persiguiendo un objetivo en común: encontrar una oportunidad laboral y compartir información profesional.
La experta indica que existen contactos de primer grado (personas que conocemos directamente), segundo grado (contactos que tenemos en común con las personas de primer grado) y tercer grado (los que se encuentran en el mismo nivel de relación con los contactos de segundo grado), lo cual supone la estrategia de ir conociendo a más gente y así ampliar las posibilidades de crear relaciones profesionales.
En el mundo, el 80% de las empresas está haciendo sus procesos de reclutamiento a través de LinkedIn, porque ha constatado que es un medio efectivo para la búsqueda de talento, sobretodo talento especializado, expresa Avilés y menciona que en Nicaragua esta idea profesional apenas está empezando a asomarse, pero que lo importante es que el país ya está dando los primeros pasos, y aunque todavía no hay una cifra total de cuántos usuarios están interaccionando en ella, se estima que son alrededor de unos diez a quince mil los que ya han creado su perfil.
Una oportunidad profesional
“LinkedIn es como nuestra hoja de vida en digital (currículum vitae), en donde al crear nuestro perfil, podemos compartir cuáles han sido nuestros antecedentes profesionales, estudios u otro tipo de preparación adicional en la que nos hemos formado”, manifiesta Avilés.
Además, en LinkedIn podemos compartir artículos de interés, ya sean escritos por nosotros mismos o por una tercera persona, podemos participar en grupos y crear debates; cuyas funcionalidades hacen de esta plataforma un medio interesante y dinámico de interactuar que gira en torno al elemento profesional, diferente del resto de redes sociales, que se concentran en el entretenimiento. Una vez que hemos decidido crear un perfil en LinkedIn, lo importante es mantenerlo actualizado y volvernos generadores de opinión en la rama de la especialización que nos identifica como profesionales, aconseja Avilés.
También para estudiantes
No necesariamente un profesional graduado y titulado puede crear su perfil en esta red. Un estudiante universitario, por ejemplo, que haya recibido algunas asignaturas en las que tuvo la oportunidad de desarrollar algunos trabajos particulares de investigación o que participó en seminarios, que haya tenido la experiencia de trabajar en una monografía o haya realizado trabajo de voluntariado, puede compartir en LinkedIn todas esas actividades. Esto lo ayuda a proyectarse en los últimos años de su carrera, a ponerse en evidencia ante las empresas, demostrando su iniciativa y sus capacidades.
Fuente: El Nuevo Diario